En este artículo publicado en Expansión, nuestros compañeros Javier Pascual, de CYSAE y Pedro Martín, de Laurrari & Martí Abogados, dan su opinión sobre estado actual de los “chatbogados”.
Una breve introducción a los “chatbogados”, antes de leer el artículo:
Un abogado “chatbot” en sentido estricto es un software de pregunta-respuesta o input-output: ante una entrada de información, el software ejecuta acciones predefinidas.
Hoy en día podemos encontrar los siguientes chatbots en el sector jurídico:
1.- Chatbots que hacen de primer filtro, de forma que cuando le llegue la consulta final al abogado humano, ya tenga mucha información de antemano de más genérica a menos genérica (ej: 1) Derecho laboral, 2) Despido, 3) Comunidad de Madrid, 4) Grado de urgencia: 2, 5) Cuantía aproximada: >10.000€).
2.- Chatbots de pregunta-respuesta simples. Estos empezarán con aspectos objetivos, como plazos (¿cuándo prescribe la acción para reclamar este daño?), cantidades ¿a cuánto asciende la multa por circular a 180 km/h en autovía? o sí/no (¿es legal ir con patinete por el parque del Retiro?).
3.- Chatbots de generación de documentos con base en variables introducidas por el cliente. Estos están muy de moda desde hace años y normalmente son contratos sencillos: compraventa de inmueble, arrendamiento de vivienda. Introduciendo una serie de datos, el chatbot te genera un documento final que, muchas veces, es exactamente igual a como lo habría redactado un abogado. En cualquier caso, de momento siempre conviene revisarlo por un experto.
Lee aquí el artículo entero: Expansión.
Otros artículo publicados sobre chatbots:
1.- Chatbots: ¿Quién responde?
2.- IA en el sector legal: ¿Un software puede asesorar jurídicamente?
3.- RPA jurídicos: la legaltech de verdad (Publicado en Legal Today)