En un primer momento, todos entendemos y tenemos bastante claro qué es un videojuego. La mayoría de las personas (por no decir todos) hemos probado alguno o hemos visto como alguien jugaba, ya sea en un pc, en un Smartphone o en cualquier dispositivo específico. ¿Pero realmente entendemos qué es un videojuego?
Esta es la primera pregunta que debemos responder para poder encajar los videojuegos dentro de la protección que da la Ley de Propiedad Intelectual (LPI). Es por ello que consideramos que la relación que existe entre la protección que da la propiedad intelectual y los videojuegos, será abordada en varios posts. Empezando, en este, por responder a la pregunta anteriormente planteada.
¿Qué es un videojuego y cuáles son sus diferentes elementos?
Lo primero que tenemos que entender es la particularidad del videojuego en relación con otras obras de entretenimiento. A la hora de disfrutar de obras como películas, libros o pinturas siempre existe una actitud pasiva por parte del espectador.
Elemento que difiere totalmente con la interacción que existe entre el jugador y el videojuego. Esta interacción no constituye un vínculo simple entre la obra y el jugador, es decir, no es comparable a parar o adelantar una película de netflix, sino que el jugador puede tomar decisiones que van a modificar las sensaciones y estados de ánimo a lahora de interactuar con la obra. Estamos hablando de una verdadera inmersión en proceso de disfrutar de la obra.
Pero en este sentido, no podemos decir que el jugador es parte de la obra, o que el jugador modifica el videojuego, ya que cada una de las posibilidades está previamente predefinida en la estructura del videojuego. En definitiva, no estamos ante el concepto tradicional de obra que recoge la LPI en su artículo 10.
En un intento de entender esta compleja obra, en realidad podríamos definirla como un conjunto de obras, que de forma unida permiten una inmersión total del jugador.
¿Qué obra componen un videojuego?
1.- Contenido audiovisual
El primer contenido que destacamos, es el contenido audiovisual. El videojuego se compone de una base de datos con imágenes (ya sea 2D o 3D). Dichas imágenes van apareciendo en pantalla según las decisiones que vayamos tomando y comunicando al videojuego a través del mando (o en ocasiones con detectores de movimiento). La creación de todo este contenido visual, se puede considerar una obra protegible.
Por otro lado, todos sabemos que los videojuegos tienen sonido, por un lado la tenemos la banda sonora que nos acompaña en la aventura, ya sea música o efectos de sonido. Al igual que las imágenes, el sonido está albergado en la base de datos del videojuego y se irán reproduciendo según vayamos avanzando. No debemos olvidar, que en muchos videojuegos tenemos diálogos con personajes (escritos u orales) que son parte de la obra, que nos lleva a la siguiente obra.
2.- Guion
Por norma general, los videojuegos suelen estructurarse con un inicio, un desarrollo y una parte final. Es decir, tienen un guion prestablecido que nos “guía” por nuestra aventura. Es por ello, que una de las partes fundamentales de un videojuego, y es importante en relación con la protección que da la LPI es el guion de la aventura. Que incluye los diálogos, la interacción con el medio, los diferentes menús ect. Parte de la obra que puede hacer de la obra un éxito total.
3.- Programa de ordenador gestor de los contenidos
Otro de los elementos fundamentales de un video juego, el programa de ordenador o software que gestiona todas las obras anteriores (imágenes, audio y guion). Este programa será el encargado de interpretar las decisiones que toma el jugador y transmite al videojuego a través de mando. Y según dichas decisiones, el programa deberá cargar de las bases de datos correspondientes, las imágenes y sonidos a reproducir y la interacción del jugador con el medio.
4.-Traducción
Por último, como elemento accesorio a la internacionalización de los videojuegos, debemos hablar de la traducción de los contenidos, tanto escritos como orales. Esta obra tiene protección según lo indicado en la LPI.
Conclusiones
Un videojuego es una obra compleja que, en realidad se compone de varias obras, lo que permite una inmersión total del jugador, ya que recibe información por diferentes canales: auditivo, visual, quinestésico e incluso táctil a través de la vibración del mando.
En el próximo post abordaremos el encaje de esta compleja obra en la LPI, como en la actualidad podemos proteger los derechos de autor de una obra que nos gusta tanto.